La defensa
del exasambleísta de Pachakutik Cléver Jiménez y de su asesor, Fernando
Villavicencio, trabaja intensamente.
El 13 de Marzo de este año se cumplió un año
desde que se ejecutorio la sentencia que los halló culpables del delito de
supuestas injurias contra el presidente de la República, Rafael Correa. Por
hechos relacionados con el 30 S El régimen pese a todos los despliegues no
logró captúralos .
El fallo de la jueza gobiernista Lucy Blacio
los sentenció a un año de cárcel. Ese tiempo ya ha pasado y la pena estaría
prescrita.
Por ello, sus abogados buscan que se declare
la prescripción de la pena, de acuerdo con lo establecido en el Código Penal.
La normativa, en el artículo 107, establece
que las penas privativas de la libertad, por delito, prescriben en un tiempo
igual al de la condena.
“La prescripción de la pena comenzará a correr
desde la medianoche del día en que la sentencia quedó ejecutoriada”, dice.
Julio César Sarango, abogado de Jiménez y Villavicencio, señala que el fallo se
ejecutorió el 13 de marzo del 2014, cuando se rechazó el último pedido de
aclaración que pidieron
Sin embargo, aún no reciben ninguna respuesta
de la Corte Nacional de Justicia.
Blacio, la jueza que los sentenció, fue
separada de su puesto en enero pasado, en la renovación de esa instancia. Por
ello, el pedido de Sarango necesita ser resorteado entre los magistrados.
“Estamos luchando para que siquiera en esta etapa le hagan justicia.
Pero tenemos un gran inconveniente: nos ponen
pretextos de que todavía no sortean el caso, que los jueces no se han posesionado”,
asegura.
Hasta que no haya la orden judicial que
determine la prescripción de la pena, Jiménez y Villavicencio no abandonarán su
refugio, cuya ubicación es desconocida y que las autoridades no han logrado
rastrear.
La última aparición en público de Jiménez y
Villavicencio fue en abril. Estuvieron en el centro poblado de la comunidad de
Sarayaku, en la provincia de Pastaza.
Pero aunque la Policía envió una delegación,
no fueron entregados por los habitantes del pueblo. Desde este paradero
desconocido, el ex asambleísta presentó el libro ‘Los secretos del feriado’, y
Villavicencio publicó ‘Sarayaku: la derrota del jabalí’, en noviembre.
Ahora su paradero es desconocido. Sarango
simplemente señala que están “a buen recaudo en la selva”, pero no puede a dar
más detalles porque violaría el secreto profesional.
Mientras tanto, en todo este año no se ha
hecho público ningún resultado de la investigación que derivó en el
allanamiento de la vivienda de Villavicencio y la oficina de Jiménez, en donde
-según ellos- se guardaban documentos y denuncias de corrupción del actual
Régimen.
El operativo se realizó en diciembre del 2013
y la Fiscalía anunció que con él se dio inicio a una indagación previa por
supuesto espionaje, según el presidente Correa, a él y a otros funcionarios
como el vicepresidente Jorge Glas y el secretario jurídico, Alexis Mera.
Fuente: DIARIO EL COMERCIO.