El 21 de junio, día exacto del solsticio, varias organizaciones indígenas,
universidades y población en general marcharon por las calles céntricas de la ciudad
de Quito y concentrarse la celebración en el Parque del Arbolito, con
ceremonias, zapateos, cantos, comida, artesanías etc. Festejaron el Inti Raymi,
como anfitrión la casa de la Cultura Ecuatoriana.
El Inti Raymi o fiesta del Sol es una de las tradiciones ancestrales más
importantes de la cultura indígena. Esta celebración, con más de 500 años de
recorrido, es un símbolo de gratitud que los pueblos andinos le ofrecen a la
Madre Tierra, y que celebran con música y danzas regionales.
Con ceremonias, pamba mesa, zapateo, música y alegría se agradeció por
el equinoccio que celebra la cosecha y el nuevo ciclo de siembra. Fernando Cerón,
presidente de las Casas de la Culta Ecuatoriana, manifestó como anfitrión del
festejo celebrando la vida, el trabajo, la comida, lo que nos hace ser
comunidades. El randi-randi, el sol y la luna alimentan los ciclos y la vida en
comunidad. Además, presento un documento al Municipio de Quito, como principal
punto que se considere una de las festividades importantes que se celebre en la
ciudad de Quito en especial sea considerado el parque el Arbolito como la plaza
más emblemática para este festejo cada año.
Avelina Rogel, sanadora del pueblo Panzaleo y del pueblo Palta, dijo
“nos hemos auto convocado, es una colaboración desde el sentir para honrar la
vida, reconocer la diversidad y ante todo ser agradecidos con lo que la
naturaleza nos entrega.”
Nelson Atupaña, dirigente de juventud de la Ecuarunari, manifestó que el
Inti Raymi (fiesta del sol) es una ceremonia andina celebrada en honor de Inti
(el dios sol), que se realiza cada solsticio de invierno. Al tratarse de una
tradición inca, el Inti Raymi se mantiene como un rito para muchas otras
comunidades indígenas de legado incaico, algunas de las cuales están asentadas
en otras partes del antiguo territorio inca, como: Ecuador, Perú, Bolivia,
Argentina, Colombia y Chile.
Las fiestas populares son parte importante del imaginario de población,
se conciben como el tiempo de lo extraordinario, de lo no cotidiano, en el que
se pone en valor el conjunto de hechos, saberes y acciones no habituales que
son parte de la comunidad en el marco de la celebración de un acontecimiento
positivo o extraordinario.
Estas acciones tienen una periodicidad por lo general anual o están
ligadas a ciclos de vida agrícola o climática. Los pueblos indígenas de los
Andes celebran cuatro grandes fiestas rituales que coinciden con los dos
solsticios y los dos equinoccios que suceden en el año.
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| Plaza Parque del Arbolito - Quito |
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