Imprevistamente, el
feriado que terminó ayer se convirtió en ‘una bocanada de agua en el desierto’
que ha sido el turismo en Esmeraldas y Manabí, especialmente tras el terremoto.
Más
de 40.000 personas estuvieron solo en el cantón Atacames, de Esmeraldas,
sobrepasando todas las expectativas, por lo que los operadores turísticos se
mostraron complacidos.
Para
este cantón el tema fue motivador, porque desde diciembre del año anterior,
cuando hubo una gran afluencia por el Fin de Año, no lucía de esa forma. Luego
vino el terremoto y eso ahuyentó definitivamente a los visitantes.
La
presidenta de la Cámara de Turismo del cantón, Sara Moyano, dijo que la
capacidad hotelera, que es, precisamente, para 40.000 personas en 18.000 plazas
de alojamiento, no abasteció la demanda y que incluso obligó a familias de la
Sierra y de otras partes del país a hospedarse en la ciudad de Esmeraldas.
Llegaron desde el
viernes
La
afluencia de turistas empezó desde el viernes muy temprano, lo que colapsó el
ingreso a la playa de Atacames. El plan de seguridad adoptado para el control
de los visitantes, contó con el apoyo de un gran contingente policial,
metropolitanos, salvavidas y otros organismos.
También
hubo gran movimiento en las playas de la ciudad de Esmeraldas, donde organizaron
desde juegos recreativos hasta un ‘bailatón’ (maratón de baile), al que
concurrieron más de 1.000 personas como una forma de atraer a los turistas
El
malecón de Las Palmas estuvo repleto de visitantes locales, nacionales y hasta
extranjeros, a quienes se los observó deleitándose con la gastronomía
esmeraldeña y disfrutando de su playa.
Sitios de agua dulce
Los
balnearios de Vuelta Larga y Tabiazo tampoco fueron la excepción. Durante los
tres días de feriado, familias enteras se apoderaron de covachas e instalaron
carpas para cobijarse del ‘astro rey’ que durante los días festivos acompañó y
motivo a los bañistas a refrescarse en las aguas cristalinas de los ríos de la
provincia. (MES-FHI)
También en Manabí
Para
el sector turístico de Manabí el feriado dejó también un saldo favorable. En
Pedernales, por ejemplo, los 10 hoteles que quedaron en pie tras el terremoto
se llenaron, confirmó ayer Patricio Schettini, miembro de la Cámara provincial
de Turismo.
Sostuvo
que la afluencia de visitantes fue “masiva” y muy superior al feriado del 24 de
Mayo. Aseveró que los sitios de hospedaje lucieron “llenos” desde el viernes
hasta ayer.
Schetinni
mencionó que los turistas llegaron, principalmente, de la Sierra, de ciudades
como Quito, Ambato y Latacunga.
Indicó
que no solo Pedernales tuvo buena acogida, sino también otros balnearios de
Manabí, aunque consideró que hizo falta mayor promoción por parte del
Ministerio de Turismo y de los gobiernos locales. “Estamos muy satisfechos”,
agregó. (RVD)
Cifra
40.000
personas
llegaron a Atacames. FUENTE: DIARIO LA HORA.
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