La zona de Intag ha resistido el ingreso de la
minería casi por dos décadas, en el proceso sufrieron eventos dolorosos que les
recuerdan el por qué se niegan al ingreso de nuevas empresas buscando metal en
sus tierras. La última empresa empeñada en esa labor es la Nacional Minera,
ENAMI conjuntamente con la Corporación Nacional de Cobre de Chile, CODELCO,
pero se topó constantemente con el rechazo de la población.
El 10 de abril de 2014 fue detenido Javier Ramírez,
presidente de la comunidad de Junín, considerada el centro de la resistencia
anti minera en Intag. Javier y su hermano Víctor Hugo son acusados de rebelión
por supuestas agresiones a funcionarios de la ENAMI.
Tiempo después, el 8 de mayo de ese año ingresó
personal de la ENAMI-CODELCO con fuerte resguardo policial a la comunidad de
Junín. Se instalaron en el lugar por ocho días para hacer los estudios de
impacto ambiental y que estos sean aprobados por el Ministerio de Ambiente, sin
el consentimiento de la población, o peor aún con el tejido social
resquebrajado, al tener a su líder detenido por un lado, y tener presencia
policial en su comunidad.
Actualmente la ENAMI tiene la licencia ambiental
para iniciar la exploración avanzada en la zona. Al mismo tiempo han ofrecido
beneficios de todo tipo a la comunidad como fruto del trabajo de minería.
Javier Ramírez cumplirá 10 meses detenido, Víctor
Hugo Ramírez permanece en la clandestinidad y mañana se reanudará el juicio penal
en su contra que busca sentenciarlo a tres años de prisión. Es así que se hace
un uso abusivo del derecho penal para criminalizar a defensores de sus derechos
comunitarios y de la naturaleza, por parte de un empresa gubernamental y otra
transnacional.
La comunidad se ve violentada en sus derechos a la
participación social, a la consulta previa, libre e informada y a decidir sobre
sus formas de vida. La zona de Intag cuenta con sus propias formas de economía
comunitaria que ahora se ve amenazada.
Hacemos un llamado a la sociedad en general a que
acompañe a Javier y a Víctor Hugo Ramírez Piedra, solicitando su libertad a las
autoridades, brindando apoyo a su lucha en defensa de los derechos humanos y de
la naturaleza y por decir NO a más criminalización.