Quito.- Como
reacción a la enmienda constitucional aprobada el pasado jueves 3 de diciembre
por la Asamblea Nacional, por la cual las Fuerzas Armadas podrá participar en
el mantenimiento de la seguridad ciudadana, militares en servicio pasivo piden
“desobediencia civil”.
Además, el Frente de Defensa de las FF.AA. anunció,
según reportó Diario La Hora, que demandaran la inconstitucionalidad de esa
enmienda ante la Corte Constitucional, pese a que ese organismo ya avaló en
primera instancia el trámite de las enmiendas impulsadas y aprobadas por
Alianza País.
“Son violaciones a la Constitución que no deben ser
acatadas”, señalaron los oficiales del Ejército (sp) Jaime del Castillo y
Alberto Molina. Además, se preguntaron: “¿Cómo el jefe del Comando Conjunto se
puede subordinar a la Policía, y los militares salir a las calles para
colaborar con la seguridad ciudadana con armamento y equipo no convencional?”
También Castillo manifestó a La Hora que “estos son
aspectos que conculcan derechos y que en la práctica no podrán cumplirse por
los riesgos que conlleva. Definitivamente las violaciones a la Ley y a la
Constitución no deberían cumplirse. Esto es una barbaridad”.
El principal cuestionamiento que los oficiales
retirados hacen tiene que ver con el armamento de los militares que consiste en
fusiles, morteros o artillería, a diferencia de los toletes y gases
lacrimógenos de la policía. Consideran que el armamento militar es incompatible
para una colaboración hacia la policía a fin de controlar la seguridad
ciudadana.
En ese sentido, el estándar internacional al
respecto, por ejemplo el establecido en el Sistema Intermaericano de Derechos
Humanos, restringe el uso de las Fuerzas Armadas en el control de la seguridad
interna porque no tienen entrenamiento para tratar con población civil y existe
un alto riesgo de vulneración hacia los derechos humanos. (I) FUENTE: LA
REPÚBLICA.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario