Por: Luis Arocha Mariño*
Desafortunadamente,
vivimos en una época donde muchas personas influyentes se enteraron de
descubrimientos científicos profundamente riesgosos: la toma de decisiones
humanas ocurre desde el inconsciente y bajo la terrible preponderancia de
factores sesgados y de orden inmediatista, en más de un 95% de los casos.
Como
seres gregarios, organizados jerárquicamente, establecemos nuestra pirámide
pública poniendo en manos de un pequeño grupo la toma de decisiones colectivas
que determinan nuestras posibilidades y oportunidades de decisiones de alcance
social, arrastrando en ello nuestra vida familiar, laboral y hasta personal. Y
esa es la esencia necesaria de la democracia, forma de organización donde
delegamos tal función, mediante el voto.
Esa
estructura psíquica que determina por quien voto -ejercicio de la esperanza-
está condicionada y amenazada por lo que nos gusta llamar en el grupo de
investigación y docencia que encabezo, el virus del AIDS MENTAL: Autoengaño,
Ignorancia, Desmesura y Soberbia, cuatro componentes de nuestra alma que
asechan constantemente nuestras decisiones. Por ello mismo, siempre
recomendamos una vacuna diaria ante tal desvarío de la naturaleza humana, con
el procedimiento TEERPHA:
Trabajo
en equipo:
nunca decida solo, tenga unos buenos consejeros a su alrededor;
Estudio: infórmese
constantemente a partir de fuentes confiables y serias;
Reflexión: siempre vuelva a
examinar cuidadosamente sus pasos antes de dar el definitivo;
Prudencia: proceda con cautela
frente a los retos que tenga delante;
Humildad: reconozca que somos
seres imperfectos y vulnerables;
Autocrítica: no tema equivocarse,
no hay otra opción para aprender cosas buenas y productivas.
De esta
manera podrá usted colocar su voto con la esperanza de que, habiendo conocido
las intenciones reales de los candidatos a elegir y se reducirá la posibilidad
de que bote su voto.
¿Por
quién voto?
Pregunta engorrosa que despierta pasiones. Le aseguro que no votará usted igual
si está poseído por el virus del AIDS MENTAL que si dispone de la vacuna
TEERPHA a su disposición y se la aplica. Garantizamos que no tiene efectos
secundarios y sacará lo mejor de su código genético.
“El
destino humano de breves dichas y largas penas
quizá
es instrumento de otro…”.
–Jorge
Luis Borges
*Luis Arocha Mariño es neurotecnólogo, psiquiatra, escritor y divulgador científico
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