El Gobierno de
Colombia y la guerrilla de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de
Colombia) firmaron este sábado un nuevo acuerdo de paz después de varias
semanas de discusiones en Cuba para ajustar el pacto inicial que fue rechazado
en un plebiscito, un nuevo intento para acabar con el conflicto armado interno
más antiguo de América Latina.
Los
cambios permitirán implementar los acuerdos para que unos 7.000 combatientes de
las FARC dejen las armas y conformen un partido político, luego de 52 años de
violentos enfrentamientos que han dejado unos 220.000 muertos y millones de
desplazados.
El
"Nuevo Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción
de una Paz Estable y Duradera" fue firmado por los jefes de los equipos
negociadores, Humberto de La Calle, en representación del Gobierno, e Iván
Márquez por las FARC, en presencia de los países garantes Cuba y Noruega.
De
la Calle admitió que el contenido del nuevo acuerdo, que no será incorporado a
la Constitución, mejora el que fue rechazado por los colombianos y hace
precisiones específicas sobre justicia y la restricción de la libertad para los
integrantes de la guerrilla.
"Con
humildad reconozco que este acuerdo es mejor en cuanto resuelve muchas de esas
críticas e insatisfacciones. Su aceptación no va a ser unánime. Como tampoco lo
fue en el primer acuerdo. Pero esperamos que la base de apoyo que recoja lo
haga más sólido", dijo el jefe del equipo negociador del Gobierno al
revelar que no habrá extranjeros en el tribunal especial de paz.
"Se
eliminó la idea de incorporar el acuerdo a la Constitución Política y al
llamado bloque de constitucionalidad. El principio general de garantía de
cumplimiento es el compromiso de que ambas partes cumplirán de buena fe lo
pactado", precisó de la Calle.
FARC dicen que
cedieron
El
inesperado resultado del plebiscito celebrado el 2 de octubre obligó al
presidente Juan Manuel Santos a iniciar un diálogo con la oposición política
liderada por el ex presidente Álvaro Uribe y a reabrir las discusiones en Cuba
con las FARC para modificar el acuerdo.
El
triunfo del "No" le impidió al mandatario implementar el acuerdo de
paz inicial sobre los sensibles temas de desarrollo rural y agricultura,
política, lucha contra el narcotráfico, justicia y un cese bilateral y
definitivo del fuego supervisado por la ONU.
"De
nuestra parte hemos cedido, incluso extendiendo las fronteras que nos habíamos
trazado, desplazándolas hasta los límites de lo razonable y aceptable",
dijo Márquez después de la firma.
RIONEGRO,
Colombia.- El ex presidente colombiano Álvaro Uribe pidió cautela ante el
anuncio del nuevo acuerdo de paz (AFP)
Inmediatamente
no quedó claro si el nuevo acuerdo será sometido a un proceso de refrendación,
aunque fuentes del Gobierno dijeron que es posible que el presidente empiece su
implementación a través del Congreso.
Uribe,
quien se reunió con Santos el sábado en Colombia, pidió mantener abierta la
posibilidad de revisar y modificar los textos del nuevo acuerdo.
Santos
dijo posteriormente en una alocución que la posibilidad de que los jefes de las
FARC puedan ocupar cargos de elección popular se mantuvo debido a que no se
pudo modificar como lo exigía la oposición política.
"Un
punto que reclamaban muchos de los del 'No' era que los jefes guerrilleros no
pudieran ser elegidos. Yo entiendo que este es el sentir de muchos ciudadanos.
En la mesa de La Habana los negociadores del Gobierno insistieron mucho en ese
punto para responder a esa preocupación", argumentó el mandatario.
"Tengo
que decirlo con franqueza. Aquí no se logró avanzar", precisó.
De
las declaraciones de Santos y de su jefe negociador en Cuba se infiere que los
líderes de las FARC tampoco irán a la cárcel como lo pedía la oposición
política.
"Este
acuerdo, renovado, ajustado, precisado y aclarado debe unirnos, no dividirnos.
Esa es mi invitación. A que nos unamos, así el acuerdo no satisfaga todas las
aspiraciones de todos los sectores. ¡Es la hora de la unión y la
reconciliación!¡Es la hora de dejar atrás las divisiones!", concluyó
Santos.
Estados
Unidos felicitó al Gobierno de Colombia por el nuevo acuerdo producto de discusiones
entre partidarios y detractores del pacto inicial y reiteró que apoyará la
implementación del proceso de paz.
"Después
de 52 años de guerra, ningún acuerdo de paz puede satisfacer a todos en todos
los detalles. Pero este acuerdo constituye un importante paso adelante en el
camino de Colombia hacia una paz justa y duradera", dijo una declaración
del secretario de Estado, John Kerry. (I)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario