El sector ha sobrevivido a más de un año de pandemia sin ningún apoyo. Los
confinamientos del fin de semana afectan y han obligado a despidos y recortes
de horas de trabajo.
Cuando inició la pandemia, a mediados
de marzo de 2020, menos del 30% de los restaurantes ofrecían servicio a
domicilio. Ahora, gracias al esfuerzo y la resiliencia de dueños y empleados,
ese porcentaje subió al 60%.
Sin embargo, este servicio representa
entre el 10% y 30% de los ingresos, por lo que, aunque ayuda, no compensa lo
que se deja de vender cuando los clientes no van a los locales.
Diego Vivero, representante de la
Agremiación de Restaurantes de Pichincha (Agrepi), recalcó que el servicio a
domicilio no es actualmente una solución.
“Muchos negocios trabajamos a pérdida sólo con la consigna de que no se nos dañen los productos, seguir trabajando y que nuestra marca siga vigente. No es cierto, como dicen muchas autoridades, que las restricciones no nos afectan porque podemos seguir operando y nuestros empleados se pueden movilizar durante los toques de queda”, dijo.
Los más pequeños a la deriva
Si un 60% tiene una facturación mínima
con la venta a domicilio, el 40% restante – que incluye a los locales más
pequeños- debe cerrar completamente durante los confinamientos y sus ingresos
se van a cero.
Daniel Rojas, dueño de El Chacal en
Cumbayá, comentó que una de las grandes trabas es que las plataformas o apps de
delivery cobran entre el 18% a 20% de comisión por cada pedido.
Rosa Vinueza, dueña de una pequeña
cafetería, explicó que los negocios de barrio se quedan completamente sin piso
con los cierres obligatorios durante los fines de semana hasta el 20 de mayo
2021.
“Entre viernes en la noche, sábado y
domingo se juega entre el 50% y 60% de los ingresos de la semana. Si cumplimos
con todas las medidas de bioseguridad y hemos invertido para afrontar la
pandemia, solo pedimos que nos dejen trabajar porque no estamos, ni de lejos,
entre los principales focos de contagios”, acotó.
Con eso concordó Vivero, y puntualizó que casi no hay personal enfermo en los restaurantes. “Lo único que le hemos pedido al Gobierno es que nos dejen trabajar. Fuimos de los primeros sectores en presentar planes de bioseguridad. Somo vigilados por el Arcsa y Ministerio de salud”, acotó.
10.000 empleos se podrían perder a corto plazo
Los confinamientos de fines de semana
en 16 provincias ya han generado despidos y recortes en los horarios de
trabajo. Eso representa menos ingresos y menos productividad, lo que genera un
círculo vicioso que alimenta las pérdidas en el sector.
Nicolás Romero Ordeñana, empresario
del sector en Guayaquil, explicó que las medidas del COE Nacional, que no solo
incluyen el confinamiento de fines de semana, podrían provocar que, entre 15
días o máximo un mes más, se tenga que despedir a 10.000 personas.
Francesca Ferrero, doctora y
presidenta de la Asociación de Restaurantes del Guayas, dijo que es “realmente
insostenible en las condiciones actuales.
“Nos vemos en desventaja frente a otros lugares donde sí hay aglomeraciones y sí está comprobado científicamente que hay contagios como es el transporte público y los centros de abastecimientos como los mercados. Nosotros, en cambio, somos castigados con una reducción de aforo del 30%, aparte de haber perdido toda nuestra venta nocturna, finalizó. (JS)
Cinco bases para la reactivación
Los gremios del sector de los
restaurantes han resumidos sus pedidos en cinco temas. En primer lugar, un plan
de vacunación que sea efectivo y rápido.
En segundo lugar, que se les permita
trabajar si cumplen con las medidas de bioseguridad; y que incluso puedan
ofrecer el servicio presencial con reservación previa durante los toques de
queda.
En segundo lugar, se ha pedido IVA
reducido o tarifa cero durante al menos un año para consumos del turismo y
alimentación. En tercer lugar, cada vez es más urgente líneas de crédito, sin
“requisitos absurdos” para pagar deudas caras y a punto de vencer.
Finalmente, planes de pago flexibles
en temas de impuestos y pagos pendientes con el IESS.
Claves para ayudar a los restaurantes
Hacer una lista de los negocios en el
barrio o cercanos a los lugares de trabajo. Consumir lo más posible en ellos,
tanto presencial como a domicilio
Ayudar a comunicar que los
restaurantes, con todos los protocolos de bioseguridad, son seguros. Los
contagios en el personal son mínimos
Promocionar en redes los locales que más le guste y necesite de ventas
- El 75% de la facturación en el sector de bebidas y alimentos es en la noche.
- Las apps o plataformas de delivery cobran entre el 18% y 20% de comisión por el costo de cada pedido.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario